Habla JESÚS SANTRICH, Farc, sobre
la matanza en Tumaco
POR DICK EMANUELSSON
“En
Catatumbo la situación es igual o peor” que en Tumaco
BOGOTÁ / TEGUCIGALPA / 2017-10-07 / En una extensa entrevista con el ex
comandante del Estado Mayor Central de la ex guerrilla de las FARC-EP, Seusis Pausias Hernández, alias Jesús Santrich, el comandante respira pesimismo ante el
panorama. Falta voluntad política del gobierno de Juan Manuel Santos y los
sectores guerreristas del Poder Fáctico intentan con todos los medios a su alcance
de sabotear el proceso de la implementación del Acuerdo de Paz.
Video/audio:
Sobre la matanza ocurrida en Alto
Mira y Frontera, Tumaco en el departamento de Nariño, frontera con Ecuador en
el sur de Colombia, Santrich dice que el Estado no puede forzar la sustitución de
los cultivos ilícitos y menos usar la fuerza brutal y asesina que el 5 de
octubre cobró la vida de seis campesinos e hirió a 21.
“El tema de las hojas de coca no es de ahora. El tema de los cultivos
ilegales viene de la época del Pacto del Chicoral [https://www.radionacional.co/linea-tiempo-paz/se-firma-pacto-chicoral]
en que la oligarquía colombiana se apoderó de los valles e interandino y lanzó
el campesinado más allá de la frontera agrícola remota.
– No creo que se puede negar la gente el derecho a la protesta aunque
eso ha quedado en que veremos. Si la política de Estado sigue desarrollándose torpemente,
sencillamente lo que va a haber es una explosión social. En Catatumbo la
situación es igual o peor (que en Tumaco).
El ex comandante Romaña,
jefe del Punto de Transición y Normalización en Tumaco exige esclarecimiento y
castigo para responsables de la Masacre de Tumaco
El ex comandante de las Farc, Edison Romaña, encargado y jefe de los guerrilleros desmovilizados en uno de los dos Puntos en el departramento de Nariño. FOTO: DICK EMANUELSSON. |
TUMACO
/ 2017-10-05 / Hoy me levante consternado. Nunca pensé que después de haber
dejado las armas con el pleno convencimiento que encontraríamos las vías
específicas para alcanzar una paz estable y duradera sin más derramamiento de
sangre, fuéramos a tener que presenciar y sufrir estos hechos tan dolorosos
cómo está masacre terrible, ocurrida en el departamento de Nariño.
Desde nuestro
Espacio Territorial de Capacitación y Normalización, ETCN, Ariel Aldana en
Tumaco, la incertidumbre y la indignación nos asaltan tomándonos impotentes,
como solo observadores de un drama humanitario sin precedentes en estas tierras
de gente humilde y soñadora.
Vimos el sobre
vuelo de helicópteros que pasaron rasantes sobre nuestra zona y todo porque en
el Alto Mira, frontera con Ecuador se presentaba la infame agresión de la
Fuerza Pública contra campesinos desarmados, derivando en una criminal masacre
que no tiene justificación alguna.
El saldo que nos
informa la comunidad es de 10 personas asesinadas a bala, y más de 30 heridos.
Los dantescos hechos fueron registrados en teléfonos celulares de la población
civil que se encontraba en el lugar de los acontecimientos.
Sigo Pensando, y
espero no equivocarme, que "La Paz" es para todos, que no se siga
mirando a los campesinos como los enemigos del país, como si fuéramos los
parias que hay que aniquilar de buscar maneras de sobrevivir en un país donde
se han cerrado las posibilidades de trabajar honesta y dignamente. Porque lo
único que quiere la gente pobre que ha sido empujada por la miseria a sembrar
coca es poder ganar el pan para sus hijos.
¿Qué confianza va
haber entre los habitantes de Tumaco con las instituciones del Estado si los
hechos vividos, fotografiados u filmados hablan por sí solos?
Lo que ocurrió es
claramente una masacre y no hay justificación que valga porque este, es un
crimen de Estado.
Les digo a mis
compañeros que hoy volví y presencié con mis propios ojos hechos dolorosos, un
año de sangre como en los tiempos del "Plan Patriota" donde se
libraban los más cruentos combates. Pero ahora aquí contra labriegos sin armas
a los que el gobierno les ha incumplido con la sustitución de cultivos y con la
inversión social.
Ya estaban
borrándose de mi mente este tipo de escenarios de terror y muerte, cuando
iniciamos el esperanzador camino de construcción de paz con la actividad permanente
de diálogo con las comunidades, con el trabajo material y las reuniones para
sacar esta región y este país de la miseria y las penurias del conflicto
armado. Pero desafortunadamente lo que estamos viviendo es la consagración de
los incumplimientos a lis que se suma esta masacre inmisericorde que no puede
pasar desapercibida por la Comunidad Internacional y por todos los organismos
defensores de Derechos Humanos.
A los campesinos y
la comunidad entera mi solidaridad y, la solidaridad de todos los compañeros y
compañeras de la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común. FARC
Exigimos
esclarecimiento de los hechos, definición de responsabilidades y sanción para
los autores materiales e intelectuales e tan abominable crimen.
Con
dolor e indignación.
ROMAÑA
Tumaco 6 de octubre 2017